Teorías de una Ciudadana cualquiera...

                  Baobabs Tanzania                       Son tantas palabras las que ya hemos gastado…Tantos silencios oyéndonos respirar, tantos pensamientos compartidos, una felicidad compartida tan difícil de evaluar, de calcular en tan poco tiempo que me abruma… Esto solo acaba de empezar, solo esta tomando forma y me llego a sorprender a mi misma pensando en cada momento en alguien al que acabo de conocer verdaderamente pero que me hace sentir en casa, me hace sentir segura de todo… me da la posibilidad de soñar sin molestarme en cerrar los ojos. Se cae el mundo y realmente ya no importa porque a el no le importa, si el sonríe nada puede ir mal…                       El es diferente a todo lo que he conocido porque es igual a mí, somos dos cuerpos con  una sola mirada al mundo, la espera para que estos cuerpos se unan es la tortura más dulce que se puede experimentar. Aun fantaseo con el momento en que lo vuelva a ver ante mí después de ese tiempo transcurrido, tener la belleza

                Fuertemente atraída por una voz, por unas hermosas palabras originadas por un reencuentro de una de esas sombras en una  noche única y especial donde todo empieza y donde solo el tiempo acaba, esa noche quizás ficticia o quizás no puesto que el alcohol mantenía la efervesencia del momento en el que habían testigos, una legión de desconocidos rostros y risas que quizás nunca vuelva a tener delante, del que solo uno se retiene, se niega a disolverse en mi mente…Es más, está condenado tomar cuerpo y alma con el paso del tiempo.             Pasaron otras sombras y ninguna permaneció, ninguna fraguó, mi piel empezó a segregar su propio aislante que no me permitía recordar ningún tacto más tiempo del imprescindible… Y así, beso muerto tras beso muerto aparece una calma en forma humana, una calma que aclama una tempestad, aclama deseo, inquietud, fantasía, calor en la estepa Siberiana y frío en el Sahara…Retratos de desconocidos que se obligan a recordarse en esa noche que